Las supersticiones espirituales, espíritus y espiritistas

Las supersticiones están tan unidas al hombre debido al hecho de que no hay ni una sola de sus actividades que no esté contagiada por el deseo consciente o inconsciente de conseguir la felicidad. El hombre no ha perdido nunca su esperanza de atraer la buena suerte sobre sí mismo, pero también tiene muy claro que existe una contrapartida, muy poco deseada por todos, que es la llamada mala suerte.

Los espíritus y espiritistas tienen un lugar de privilegio en las supersticiones. Sólo tenemos que recordar que todas y cada una de las cosas existentes en la Tierra tienen su propio espíritu, la lista de espíritus es interminable abarcando tanto seres vivos (animales y plantas), como objetos y toda clase de cosas, desde las que se hallan en la Tierra hasta las que se pueden encontrar en el resto del universo.

Por lo tanto, en estas supersticiones espirituales se engloban toda una serie de creencias que nos llevan desde los espíritus primitivos a los espíritus más actuales, pasando entre medias por las leyendas populares y los mitos existentes en todos y cada uno de los países. De esto saben mucho los espiritistas.

A espíritus del agua, del grano, de la vegetación, de los árboles, en suma, a todos los espíritus, se les puede asignar toda una serie de leyendas y supersticiones que se han afincado en los diferentes países, de éstos y de sus gentes han tomado sus particularidades, y todas estas supersticiones tienen su origen y base en los espíritus primitivos.

Las leyendas y supersticiones intentan relatar hechos reales revestidos de un tradicionalismo especial. Aunque intentan ser realistas, se dejan llevar por el deseo habitual del hombre de que las cosas sucedan según sus deseos y no como sucedieron en realidad. De ahí proviene la circunstancia de que muchos hechos reales aparezcan desvirtuados, para bien o para mal, por las supersticiones y leyendas.

En el apartado de las supersticiones o leyendas supersticiosas hay una extensa gama de ellas que son prácticamente idénticas, aunque cada pueblo que las recoge les ha añadido diferentes variantes adaptándolas a las formas de vida que dichos pueblos siguen en particular.

Por otro lado, existen personajes exteriores al hombre, los llamados personajes espirituales fantásticos, que ayudan o perturban la vida de los humanos. El número de personajes es tan amplio como pueblos y culturas existen en el mundo. Entre estos espíritus podríamos destacar los siguientes:

• Duendes: pequeños espíritus con figura humana, carentes de alma y que habitan en sitios solitarios.


• Genios: seres tutelares o enemigos que acataban las órdenes de sus dueños bajo ciertas premisas, conjuros e imprecaciones.


• Gnomos: seres fantásticos, que los cabalistas definen como espíritus o genios de la Tierra, a los que posteriormente se les ha asignado la responsabilidad de ser enanos que guardaban o trabajaban los manantiales de las minas.


• Gremlins: también conocidos como trasgos. Son duendecillos o espíritus burlones que, en la época moderna, se dedican a empañar los cristales de los aviones, obstruir el paso de aceite en los motores, atascar los controles de los reactores y hacer que sus aparatos de control funcionen incorrectamente.


• Hadas: espíritus fantásticos con figura de mujer a los que se atribuyen poderes mágicos y encargados de conceder las peticiones de aquellos que son de su agrado.


• Kobolds: habitantes de las minas abandonadas situadas en Escandinavia, espíritus con figura de enanos orejudos y moradores de las cavernas que se encuentran a orillas del mar.


• Leprechauns: hombrecillos que viven donde existen tesoros escondidos y ocultos.